A los dos días de empezar a darle puré de verduras a Álvaro, también empecé a ofrecerle en la merienda la papilla de frutas.
La primera semana no fue del todo mal, comía bastante, pero yo creo que no le acaban de gustar los sabores de la fruta. Las primeras cucharadas se las come bien, pero en seguida se cansa y cierra la boca y no hay forma de que siga comiendo.
Yo creo que sacia un poco el apetito y como no le hace mucha gracia, no quiere seguir comiendo. Teniendo en cuenta lo que mi niño come, estoy convencida de que se queda con hambre.
Hoy he hecho la prueba. Le he dado un biberón con cereales después de la papilla y no os imagináis cómo se lo ha comido.
A Álvaro le debe gustar más lo salado y el sabor dulzón de la fruta dice que me lo coma yo.
Se lo tendré que comentar al pediatra a ver qué me dice y cómo podemos hacer para que coma más fruta o darle algún suplemento.
No se qué os habrá pasado a vosotras, pero igual me podéis dar algún truco que os haya funcionado con vuestros bebés.