Este fin de semana hemos estado de boda. Para Álvaro ha sido su primera boda y os puedo asegurar que ha disfrutado como un enano. No ha parado quieto ni un minuto y hasta bien entrada la noche no se durmió.

La boda era de su tía Maite y su tío Javi. Se casaron el 10 de octubre y Álvaro se vistió para la ocasión con un traje con chaleco y corbata. Iba guapísimo y muy gracioso… aunque le duró poco. En cuanto me quise dar cuenta ya no tenía ni la corbata ni la chaqueta y se había sacado la camisa por fuera. Bueno, supongo que son cosas de niños.

Se portó muy bien durante todo el tiempo aunque no conseguimos hacerle ni una foto en condiciones, porque eso de ver tanta gente desconocida con tantas cámaras no le hizo mucha gracia, así que me tendré que conformar con las fotos que pudimos hacerle corriendo de aquí para allá.

Conforme iba pasando el tiempo, se iba encontrando más a gusto, pero quería ir y estar a su ritmo, sin que nadie le cogiera o le tuviéramos sentado… él quería correr y jugar todo el rato y vaya si lo hizo… todavía no se ni cómo no se cayó al suelo y se abrió la cabeza, porque os aseguro que iba como un loco por todo el salón jugando y riéndose.