Cuando miro los juegos y juguetes para mis hijos de cara, sobre todo, a las Navidades, son muchos los factores que entran en juego. Yo les dejo que elijan lo que les gusta y luego les oriento un poco. La verdad que con mi hijo nunca he tenido problemas, porque mira dos páginas de los catálogos y me dice que lo que yo quiera. O me pide algún juego que tenga algún amigo y que haya jugado. Así que juego con ventaja porque una vez veo qué le puede gustar, le animo a que lo mire, me pregunta cómo va o cómo se juega y suele decirme que le gusta. La peque ha sido este año cuando ya empieza a pedir cosas, pero se deja guiar también fácilmente.
Pero además de lo que pida cada uno, también me gusta que tengan algún juego en el que puedan jugar los dos solos.
Así que mirando opciones de cara a los Reyes Magos, he visto esta muy divertida, Rapelli de Hape. Se trata de un cilindro verde de bambú con 18 gusanitos de colores que se han apoderado del bambú y el juego consiste en sacarlos para que no consigan comerse todo el tronco. La suerte dependerá de los dados, ya que igual que pueden ir saliendo, también pueden hacer que vuelvan a entrar, jeje.
Sin duda, un divertido juego para niños a partir de los 4 años y en los que hay diferentes modalidades de juegos en función de los jugadores que haya, por lo que cada partida puede ser diferente.
Ya tenemos otro de la misma marca con el que hemos jugado muchas veces y a los niños les gustaba mucho, Rápido, también con bambú y de una calidad exquisita.
Ya he comentado en alguna otra ocasión que además de los juguetes que piden los niños a Papá Noel o Los Reyes Magos (nosotros celebramos ambos porque en Nochebuena estamos con una parte de la familia y en Reyes con la otra), a mí me gusta dejarles pequeños regalitos que no esperan junto a lo que han pedido. Y en ciertas ocasiones, les hacen casi más ilusión o más caso a la larga que a otros juguetes.
Para este año, he visto varias cosas que me han gustado. Una es un Yoyó. Hace unas semanas, mi hijo vio a un niño jugando con uno y me dijo que le gustaría tener uno, así que es el momento, jeje. El Yoyó que he visto es el Triple Moon, un yoyó multifuncional con giro libre, auto-retorno y eje fijo pero que lo pueden usar tanto personas que controlen como principiantes, como es el caso. Este en concreto es para niños a partir de los 8 años que ya tengan cierta destreza pero podéis encontrar muchos más modelos de yoyós por internet.
Y otra cosa que me ha parecido muy graciosa y que a los niños les puede gustar mucho son estas
pistolas (no me gusta mucho emplear esta palabra) o mejor dicho, lanzadoras de serpentinas. Apretándolas saldrán serpentinas de colores y harán que se lo pasen pipa con ellas. También pueden servir para animar una fiesta de cumpleaños o cualquier otra celebración. Y vosotros, ¿ya tenéis todos los regalos preparados?