Vamos a hablar de este gran producto que no cuenta con la fama que se merece y que muchas veces se ve menospreciado.

Su misión es posicionar y mantener la banda inferior del cinturón de seguridad del vehículo en la zona pélvica de la mujer embarazada. De modo que ante un accidente o simplemente en un frenazo, el cinturón se mantiene siempre en la pelvis, no se sube al abdomen, no lo oprime y no causa daños graves al bebé.

El cinturón de seguridad sin adaptador puede salvar la vida de la madre, pero puede causar la muerte del bebé.

Hay que recordar que el cinturón de seguridad es de uso obligatorio para todos los ocupantes de un vehículo, incluidas las mujeres embarazadas, desde el primer al último día de gestación.

En el mercado hay distintos tipos y distintas marcas. Los que sujetan el cinturón en los laterales es cierto que son más cómodos para usarlos con vestidos y faldas, pero dejan libre el cinturón en la zona más peligrosa, la central. Por tanto no son los más seguros.

Hablando con unos amigos que han estado informándose al respecto, me comentaban que personalmente recomendaban el uso del BESAFE PREGNANT, porque está homologado (norma de seguridad europea ECE R-16), porque lo respalda una de las mejores marcas en sistemas de retención infantil (BeSafe) y porque es el único que sujeta y mantiene el cinturón donde debe estar, en la pelvis. Está recomendado a partir del segundo mes. Además ha sido el que ellos habían usado durante el embarazo de su primera hija (Claudia de dos añitos) y actualmente en el del segundo (en camino).

Se puede conseguir en cualquier tienda especialidad en Sistemas de Retención Infantil que trabajen con la marca Sueca. Ellos lo compraron en su localidad de residencia Valdepeñas en A GATAS una tienda especializada en S.R.I y a contra marcha, ahora tienen tienda online www.agatasonline.com.

No son pocas las opiniones injustificadas y erróneas que oímos respecto a este tema. Y en contra de lo que se pudiera pensar, la gran mayoría suelen venir de las propias embarazadas:

– A las que afirman que a ellas el cinturón no les molesta, y que por tanto no necesitan el adaptador, les decimos que no es cuestión de molestia o comodidad, sino de seguridad.

– A las que opinan que no necesitan el adaptador porque ellas mismas se sujetan el cinturón en la zona de la pelvis, decirles que en caso de accidente o de frenazo, en esas décimas de segundo no van a ser conscientes de lo que hacen, soltarán el cinturón, se les acabará subiendo y apretando dónde no debe.

– A las que ven el adaptador como otro invento saca-dinero, les decimos que está en juego la vida de su hijo antes de nacer.

El adaptador es un producto imprescindible que toda embarazada debería usar. Hay otras muchas cosas con las que se puede ahorrar.

CUIDARÁS A TU HIJO, LO PROTEGERÁS, QUERRÁS LO MEJOR PARA ÉL… NO ESPERES A QUE NAZCA!

¡RECUERDA: UN CINTURÓN, DOS VIDAS!