Hace 4 años decidí dar forma a todas las inquietudes que rondaban mi cabeza con un blog. Esos inicios coinciden con el instante que me quedé embarazada de mi primer hijo. A través de mi diario, Diario de una Madre, comencé una bitácora de este gran viaje compartiendo mis experiencias con la maternidad, el embarazo, el parto, la crianza y educación de mis hijos, entre otras cosas.

Y cuatro años más tarde aquí estoy, con periodos más activos y otros no tantos, pero intentando contar mis anécdotas y vivencias con mis pequeños, que son lo más importante de mi vida.

Momentos duros y complicados, sobre todo cuando ellos están o han estado malitos, momentos felices cuando disfrutamos los unos de los otros, pero sin duda, momentos especiales donde los haya, porque cada cosa, cada instante con ellos, cada nuevo reto superado, hace que haya una mamá feliz…, sí, esa soy yo.

Yo como madre, he madurado, he modificado actitudes o formas de vida por otras ligadas a lo que la maternidad implica, pero NO LO CAMBIO POR NADA DEL MUNDO… es más, me gusta ser madre, valorar muchas cosas nuevas que he aprendido y que, por supuesto, sigo aprendiendo, porque si algo es evidente, es que los niños no vienen con manual de instrucciones y cada día es una nueva aventura, que me encanta protagonizar con ellos, mis pequeños.

Durante estos 4 años he descubierto una nueva forma de comunicar y expresar a través de nuevos canales de comunicación como son el blog www.diariodeunamadre.com, y no podían faltar las redes sociales como facebook y twitter (@diariode1madre).

Mi perfil de facebook es mucho más joven aún, aunque poco a poco se acerca a su primer aniversario. Mientras tanto, disfrutaré de los cuatro años del blog.

Gracias por estar ahí.