Las cesáreas se deben llevar a cabo en determinadas situaciones, cuando surja un problema que no se puede solucionar de otra forma o no hay tiempo que perder porque hay sufrimiento fetal o de la madre.
Sino, el parto vaginal es el más indicado.
La cesárea puede ser programada o de urgencia.
Paso a detallaros los casos en los que conviene hacer una cesárea programada:
Mala posición del bebé: Cuando el bebé se presenta de nalgas o sentado y días previos a la fecha de parto no ha cambiado su postura. Siempre nos pueden sorprender y dar un giro en el último momento, pero son pocos los casos.
Parto múltiple: en los embarazos con dos o más bebés suele ser aconsejable una cesárea.
Herpes genital: Cuando la madre tiene una infección como el herpes genital, ya que algunas infecciones pueden contagiarse al bebé a través del canal de parto.
Placenta previa: Al existir placenta previa, las contracciones provocadas por un parto vaginal provocarían un desprendimiento de placenta antes de tiempo, provocando una fuerte pérdida de sangre. Además de bloquear la salida del bebé.
Enfermedades maternas: Cuando la madre tiene ciertas enfermedades que un parto natural puede poner en riesgo su vida o la del bebe (como la diabetes o la preeclampsia o incluso una miopía muy alta para evitar un desprendimiento de retina por el trabajo del parto).
Dos o más cesáreas previas, ya que un parto vaginal podría romper la cicatriz ya existente en el útero.
julio 21st, 2009 @ 21:37
ah ya me he enterado de la diferencia.! solo se practica cesarea en determinados casos.
julio 22nd, 2009 @ 8:14
Eso es María, en principio, la cesárea sólo se debería practicar en determinados casos, ya que no hay que olvidar que no deja de ser una intervención quirúrgica en toda regla, y aunque hoy en día no es como antes, el post-operatorio hay que pasarlo. Sólo es aconsejable en los casos en los que hay riesgo para el bebé o la mamá o por algún motivo concreto como que no se dilate lo suficiente y el bebé no pueda pasar por el canal de parto.