La cesárea es una intervención quirúrgica que, como toda cirugía mayor, conlleva unos riesgos. No obstante, los avances en esta ciencia y, concretamente, en el ámbito ginecológico, hacen que este procedimiento sea más seguro y mejor que años atrás.
También es evidente que esta práctica ha salvado muchas vidas y seguro que lo seguirá haciendo.
Sin embargo, no está de más conocer algunos de los riesgos que podemos padecer las mujeres y nuestros bebés al practicarnos una cesárea. Algunos de estos son:
-Los riesgos de cualquier intervención bajo anestesia
-Reacciones a la medicación
-Problemas respiratorios
-Hemorragias
-Infecciones en el útero
Además, hay que tener en cuenta, que:
-Aumenta de 5 a 20 veces el riesgo de infección (endometritis)
-Aumenta el riesgo de internación del bebé en neonatología
-Aumenta el riesgo de distress respiratorio neonatal
-Aumenta el tiempo de internación materno
-Aumenta el dolor post-parto