No me considero una persona que le guste estar sin hacer nada. Los que me conocen saben de lo que hablo. Pero en esta nueva andadura como madre, hay algo que reconozco que es fundamental y no me había dado cuenta hasta este momento.
Normalmente, escuchas comentarios de la gente al respecto de que las 16 semanas de baja por maternidad son insuficientes o de que somos el país que menos periodo de baja por maternidad tenemos.
Ahora que soy madre primeriza, entiendo todos estos comentarios y es más, los comparto. Dieciséis semanas no dan apenas para nada y el bebé no está lo suficientemente preparado para ir a la guardería o tener que cuidarlo otra persona que no sea su madre (o su padre en su defecto). Además, la madre todavía no descansa bien debido al cambio de horarios.
Cuando el bebé tiene cuatro meses, es cierto que ya empieza a estar más despierto y te da un poco más de juego, pero aún así, sigue siendo un bebé que sólo puede estar tumbado, que hay que dedicarle tiempo, que las tomas del pecho o biberón, aunque un poco más espaciadas, hay que seguir dándoselas.
Al incorporarse a trabajar la madre en este momento, lo único que se consigue es un agotamiento enorme, ya que además de trabajar, tiene que seguir cuidando al niño y hacer las tareas de casa. Por eso, no es de extrañar que muchas mujeres tengan la obligación de pedir una reducción de jornada o incluso irse al paro para poder sacar todo adelante y lo más importante, estar con su bebé.
Desde la Organización Mundial de la Salud y UNICEF entre otras asociaciones, se recomienda que ésta se amplíe, por lo menos, hasta los seis meses, periodo mínimo exclusivo de lactancia materna.
Considero primordial que se estudie este tema y se modifiquen las leyes al respecto. La baja por maternidad tendría que ser de un año, tiempo suficiente para que el bebé ya no dependa tanto de la madre, que se mantenga sentado y algunos ya sepan andar. Y sobre todo, estudiar de qué forma compensar a las empresas que empleen a mujeres con niños o que se les facilite su horario. En definitiva, que concilien la vida familiar y laboral.
julio 21st, 2009 @ 22:28
totalmente de acuerdo,16 semanas es de risa,el bebé es muy bebé aún.fijate yo diria la que pueda dejar de trabajar o pedir la baja 6 meses o incluso 1 año.la que no,no hay más remedio,pero un bebé es mucho trabajo,noches sin dormir,cansancio etc..me supongo.
julio 22nd, 2009 @ 8:21
Tienes toda la razón y es un tema que nuestros políticos deberían plantearse. Álvaro tiene ahora 16 meses y es ahora cuando empieza a ser algo más independiente. Al año por lo menos ya se mantiene erguido, tiene otra alimentación y depende qué niño ya entiende o anda. Los bebés de 4 ó 5 meses que tienen que ir a al guardería porque los padres tienen que trabajar son demasiado pequeños a mi parecer.
Y te puedo asegurar que un niño es mucho trabajo, por muy bueno que sea. Y eso siempre y cuando duerma bien por las noches y te deje descansar. Yo conozco casos en los que las mamás apenas duermen porque se despiertan 2 y 3 veces y el cansancio acumulado se nota a la legua.