Los expertos aconsejan que el bebé permanezca con la madre hasta los dos años de vida, edad suficiente para poder afrontar con éxito muchos aspectos: contacto con otros niños, andar perfectamente, comer solo, compartir juguetes con otros niños, dominar algunas palabras fundamentales, etc.

Pero muy pocas familias pueden permitirse que uno de los miembros de la pareja se ausente del trabajo durante ese periodo o simplemente no trabaje. El frenético ritmo de vida que llevamos, los gastos mensuales y un sinfín de motivos más convierten esta opción en un sueño. Aquí es donde entran en juego las guarderias.

No obstante, al decidirnos a llevar a nuestro hijo a una guardería o escuela infantil o dejarlo al cuidado de una canguro (o de los abuelos), tenemos que prever el hecho de que el niño se ponga malito y no le podamos llevar a la guardería para evitar que entre en contacto con el resto de niños y se contagien; o que los abuelos o persona encargada de cuidar al niño un día no pueda hacerse cargo de él.

Contar con otra persona de confianza que nos haga el favor o poder ausentarnos del puesto de trabajo unos días es necesario. Así que os aconsejo tener previsto este hecho por lo que pueda pasar.

A veces es todo tan complicado. O nosotros lo hacemos complicado, no se. Yo a partir de enero comenzaré a buscar guarderias en madrid para mi pequeño. Ya os contaré que tal la búsqueda.