La vida actual nos hace llevar un ritmo de vida frenético que no es bueno para nadie. Pero al fin y al cabo, es lo que hay, y como apenas tenemos tiempo de nada, todo lo tenemos que hacer corriendo. Vamos de aquí para allá y de arriba abajo sin un respiro.
Esto no debería ser así. Deberíamos poner los medios necesarios para levantar el pie del acelerador, y seguramente, todos estaremos mejor y sin tanto estrés.
Pero una cosa hay que tener clara, y es que cuando decides quedarte embarazada, tienes que cambiar radicalmente si no quieres tener más problemas de los necesarios.
Desde el preciso instante que te planteas ser madre, o desde el momento en el que te quedas embarazada, es muy importante cambiar tu ritmo de vida, no sólo por ti, sino por tu bebé. Ten en cuenta que todas tus angustias, sufrimiento, estrés, nervios y un largo etcétera, se los transmitirás durante los nueve meses, y todo ello irá formando parte de tu pequeño.
Lo mejor es planificarte de tal forma que tengas prioridades y vayas resolviéndolas poco a poco. Lo que no puedas hacer hoy, déjalo para mañana sin agobiarte y ya verás como tú y tu bebé lo agradeceréis.
Yo tuve un embarazo muy bueno y siempre intenté tomarme las cosas de otra forma, pese al puro nervio que soy, y la verdad que no me arrepiento en absoluto.
julio 29th, 2009 @ 20:36
Pues ami no me fue muy bien en mi embarazo. Aunque solo daba consultas los sabados. Y entre semana estaba en casa, mi embarazo fuè un torrente de hormonas, hasta creo que me dió una depresión por que no me sentí bien en ningún momento, todo me dolia, de principio a fin y para rematar me hicieron cesarea, no tube suficiente leche y el cambio hormonal me pego durisimo de nuevo, hasta dos semanas despuès de todo me estoy acoplando, la verdad no me quedaron ganas de embarazarme de nuevo, adoro a mi hijita, pero no quiero màs hijos.
julio 30th, 2009 @ 7:38
Hola Lala, muchas gracias por tu comentario. La verdad que un mal embarazo te debe quitar las ganas de otro. Es increíble el cambio hormonal que sufrimos las mujeres al quedarse embarazadas y cómo mientras a unas les afecta mucho negativamente, otras en cambio casi ni se enteran. Mi embarazo fue muy bueno en general a excepción de los tres primeros meses con las naúseas y vómitos. Para mí esos meses fueron horribles ya que no podía hacer nada, lo que me gustaba comer me daba naúseas y había días que no podía ni moverme de lo mal que me encontraba, pero de la noche a la mañana todo desapareció. Por eso supongo que tengo un buen recuerdo. Espero superes ese momento y ya verás como con el tiempo se te olvida y si decides tener otro hijo no tiene por qué ser igual el embarazo. Un abrazo.