Es fundamental que el bebé adquiera unos hábitos diarios, con los que poco a poco vaya familiarizándose y que, con el tiempo, no le supongan ni a los padres ni al pequeño, ningún trastorno.
Realizar las mismas actividades rutinarias son indispensables los primeros meses del bebé. Álvaro se acostumbró rápidamente a su paseo de la mañana y de la tarde, a su hora del baño y a su masajito, a su horita de sueño por la mañana, a su siesta después de comer y en cuanto me quise dar cuenta, ya habíamos establecido una rutina que se iba repitiendo día tras día.
Desde mi experiencia, os aconsejo que enseñéis a vuestros pequeños a dormir el máximo tiempo posible. Los primeros meses es muy fácil, porque prácticamente no hacen otra cosa, pero a partir del quinto o sexto mes, que ya empiezan a dormir menos, es de vital importancia que se les acostumbre a unas horas de sueño por el día para que estén descansados el resto del tiempo.
Además, todos los expertos coinciden en que el sueño en los bebés y niños alimenta tanto como la comida.
Álvaro nunca tuvo problemas de sueño una vez lo conciliaba. El problema fue que le costaba cogerlo. En cuanto le acunabas un poquito o le mecías, se quedaba frito. Al principio lo tienes que hacer, aún sabiendo del riesgo que se habitúe a eso, pero ¿cómo le vas a dejar que llore tan pequeñito? Yo me arriesgué y bueno, hay días que tengo que dormirle y otros no hace falta, está tan cansado que en cuanto le dejo en la cuna cae rendido. También es cierto que, poco a poco, gasta mucha más energía porque no para ni un momento, por lo que llegará un momento en el que simplemente con su baño, su masaje y tomarse el biberón ya sabrá que es hora de dormir.
Y en cuanto al resto de tareas rutinarias, lo mismo. El paseo diario, el baño y los juegos son muy importantes en los bebés y, más adelante, en los niños.
Desde aquí os animo a que sigáis un planning y que os habituéis lo más rápido posible a él. Os aseguro que vuestro niño os lo agradecerá, pero las que más lo notaréis seréis vosotras, sabiendo de antemano las horas, ratos y demás minutos de los que disponéis.
octubre 9th, 2008 @ 11:35
La verdad es que lo de las rutinas es algo complicado sobre todo si te sale un bebé complicado como el mío que le cuesta dormir. Siempre que le acuesto tengo que mecerle en los brazos e incluso a veces acostarme con él, si no es imposible que se duerma. ¿Que crees que puedo hacer para crearle el hábito?
Por cierto, felicidades por el blog, está muy bien saber la experiencia de una madre primeriza como yo.
octubre 9th, 2008 @ 23:49
Hola Maria Luisa, muchas gracias por tu comentario y me alegro que te guste el blog.
Deberías intentar que se duerma solo. Desde luego que no será fácil, pero tienes que intentarlo. Yo a Álvaro, sobre todo al principio, también le mecía para dormirlo, pero poco a poco fui dejándole en la cuna hasta que se acostumbró a dormirse solo. Las primeros días lloró bastante, pero al final conseguí que se durmiera él solo. De todas formas, acunarle un poco no está mal, pero no le acuestes cuando ya esté dormido totalmente, sino que yo te aconsejo que le acunes un poco y le dejes. También es cierto que cada niño es diferente. Evita acostarte con él, porque los niños son muy listos y siempre vas a tener que hacerlo. El método Estivill a mí me ayudó bastante. Y también te puede ser de ayuda su libro «Duérmete niño».
Mucha suerte.
diciembre 16th, 2008 @ 21:10
Como una ayuda adicional se pueden usar aceites naturales aromaterapeuticos en el masaje infantil para realzar la experiencia. Asegurese de que el remedio natural que use sea seguro para bebés.